#

La Senacyt y el Ministerio de Salud realizán el Café Científico ‘Día Internacional de la Capa de ozono 2022 – Protocolo de Montreal@35: cooperación global para proteger la vida en la tierra’

Panamá, 21 de octubre de 2022. La Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), en conjunto con el Ministerio de Salud (Minsa), realizaron el Café Científico “Día Internacional de la Capa de ozono 2022 – Protocolo de Montreal@35: cooperación global para proteger la vida en la tierra”.

Los panelistas fueron: la Lic. Mayra Botacio, jefa del departamento de saneamiento ambiental del Minsa; el Prof. Alfonso Pino Graell, director del Laboratorio de Física de la Atmósfera, de la Universidad de Panamá (UP); y el Dr. Juan Valdés, químico de la atmósfera de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP).

El Prof. Alfonso Pino Graell expuso sobre laevolución del adelgazamiento de la capa de ozono en la Antártica (agujero de ozono) desde 1979 hasta 2021, el comportamiento anual de la columna de ozono en Panamá, la cual ha sido medida por el Laboratorio de Física de la Atmósfera de la Universidad de Panamá; y de los niveles de radiación ultravioleta B (UVB) en el país.

El Dr. Juan Valdés González explicó la dinámica de los gases en la atmósfera y las reacciones químicas que provocan la destrucción del ozono (O3). También se refirió a la contaminación atmosférica en Panamá, cómo los vertederos inciden en las emisiones de metano, y mencionó la necesidad de contar con normas sobre emisiones para distintos sectores.

Qué pasa en la estratosfera

La atmósfera terrestre se compone de varias capas: troposfera, estratosfera, mesosfera, termosfera y algunas subcapas. La capa de ozono (O3) es una franja de gas que absorbe la radiación ultravioleta B (UVB), actuando como filtro para proteger la Tierra de los efectos nocivos de los rayos solares. En los trópicos, el principal factor de atenuación de la radiación UVB es la cobertura de nubes.

Durante años, el uso de algunas sustancias químicas, como los halocarbonos, que son compuestos en los que uno o más átomos de carbono están unidos a uno o más átomos de halógenos (flúor, cloro, bromo o yodo), fueron agotando o adelgazando la capa de ozono.

Los clorofluorocarburos (CFC)son gases que se usan en refrigeración y como propulsores en los aerosoles. Tienen una gran persistencia en la atmósfera y, mediante reacciones químicas cíclicas, liberan los átomos de cloro y éstos van destruyendo las moléculas de ozono, reduciendo el escudo protector. Tanto el adelgazamiento de la capa de O3 como el calentamiento global, son fenómenos estrechamente vinculados.

La estratosfera se distribuye desde los 12 km (varía según la latitud) hasta 50 km de altitud. La temperatura en esta zona aumenta por dos razones: porque la mayor concentración de O3 se encuentra en la estratosfera, y porque allí se depositan gases de efecto invernadero (GEI) como el dióxido de carbono (CO2) y el metano (CH4), que absorben radiación infrarroja térmica y la reemiten en su mayor parte a la superficie de la tierra, y están asociados con el calentamiento global.

El adelgazamiento de la capa de O3 sobre la Antártica fue descrito por científicos británicos en 1985. En 1994, la Asamblea General de Naciones Unidas proclamó el 16 de septiembre como el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, en conmemoración de la firma del Protocolo de Montreal sobre sustancias que dañan la capa de O3, firmado en 1987. 

Desde el año 1989, cuando entró en vigor el Protocolo de Montreal, el gobierno de Panamá, junto al sector empresarial y la sociedad civil, han trabajado para que el país pueda cumplir con las metas de eliminación de sustancias agotadoras de la capa O3 y otros compromisos.

La Enmienda de Kigali, que regula otros temas relativos al Protocolo de Montreal, entró en vigor el 1 de enero de 2019 con el objetivo de reducir los GEI y limitar el calentamiento global. Bajo la Enmienda de Kigali, Panamá, junto a otras naciones del mundo, se enfrenta al desafío de reducir el consumo de los gases fluorados o HFC, para contribuir a la reducción de la temperatura promedio global.

Desde mediados del año 2000 hasta 2019, la extensión del agujero de ozono en Antártica se redujo, asociado a la implementación del Protocolo de MontrealEn 2022, el Protocolo de Montreal cumplió 35 años y ha sido uno de los acuerdos ambientales de mayor éxito para eliminar y reducir gradualmente el uso de sustancias que agotan la capa de O3.

No obstante, el aumento de la concentración de CO2 incide en las temperaturas extremadamente bajas en la estratosfera antártica, y esto ha favorecido la aparición de nubes polares estratosféricas más extensas y de mayor volumen, que conllevan la destrucción significativa del ozono. Esto explica por qué, en 2020 y 2021, el agujero de O3 en la Antártica creció rápidamente a partir de agosto, durante el invierno austral.

“Para el Minsa, es fundamental continuar trabajando por la capa de ozono y el clima, ahora, enfocándose en el fortalecimiento de las capacidades nacionales para lograr un sector de refrigeración y aire acondicionado más sostenible, más eficiente y con menos emisiones de GEI, promoviendo la introducción de nuevas tecnologías como los refrigerantes naturales que reemplazarán a los hidrofluorocarbonos  (HFC) en el sector de refrigeración y la climatización, reduciendo el consumo de energía en el comercio y la industria de nuestro país”, mencionó la Lic. Mayra Botacio.

“Uno de los problemas que tenemos, y que va a ser más crítico, es que, actualmente la capa de ozono está disminuyendo. No se están tomando en cuenta los efectos de emisiones al aire de la gran cantidad de barcos que trasladan petróleo a través del mundo y la cantidad de combustible que usan, y esto contribuye a la destrucción de la capa de O3 y aumenta el problema del cambio climático que, si bien es un fenómeno natural, la actividad humana está incrementando su efecto debido a las emisiones”.

El Dr. Valdés también mencionó que, en Panamá, no se tienen normas de emisión por fuentes estacionarias que utilizan sistemas de generación de energía (calor), ni un inventario de fuentes emisoras de contaminantes al aire. “No tenemos todavía consolidada una normativa para la regulación de las emisiones al aire, de los autos, por ejemplo, de las industrias, y tenemos que empezar, poco a poco, a hacer un inventario de fuentes de emisión y determinar cuáles son las concentraciones en el aire en nuestro país, sin eso, no podremos normar ni controlar las emisiones”.

Los nuevos refrigerantes, a base de hidroclorofluorocarbonos tienen un potencial de agotamiento de ozono menor que los fluorocarbonos, pero tienen un potencial de calentamiento global significativo, es decir, que contribuyen al cambio climático.

Una preocupación compartida por ambos científicos es el aumento sostenido de la concentración de metano en la atmósfera del planeta desde 2005, aproximadamente, ya que el metano tiene un potencial 21 veces mayor que el de CO2.  En ese sentido, señalaron que se está estudiando cuál es el efecto combinado del CO2 y del CH4 en el calentamiento del planeta, y las cifras son preocupantes.

La concentración más grave se da en las latitudes boreales por el calentamiento de los océanos, la pérdida de hielo en los glaciares y del permafrost. Debajo del permafrost hay grandes cantidades de compuestos de carbono en forma de metano.