
Estudio inédito refleja percepción ciudadana sobre la libertad de expresión y de prensa en Panamá
Panamá, 9 de octubre de 2025. Un diagnóstico impulsado por la Fundación Fórum de Periodistas por las Libertades de Información y Expresión, realizado por el Centro Internacional de Estudios Políticos y Sociales (CIEPS) y, con el apoyo de la Unión Europea, advierte que, aunque Panamá mantiene condiciones favorables para el ejercicio de las libertades de expresión y de prensa, persisten obstáculos estructurales y percepciones de desconfianza que amenazan su fortalecimiento.
El Estudio sobre las Libertades de Expresión y de Prensa en Panamá 2025, dirigido por los investigadores Dra. Raisa Urribarri y Dr. Jon Subinas, encuestó a 1,230 personas en todo el país, combinando metodologías cuantitativas y cualitativas que incluyeron entrevistas con dueños de medios, líderes gremiales y periodistas, así como grupos focales en la capital y en Chiriquí.
Los resultados revelan que dos de cada tres panameños (67%) creen que existen limitaciones para expresarse libremente y 58% reconoce haber sentido miedo de manifestar sus opiniones por temor a represalias.
Asimismo, el 61% considera que los medios nacionales no son libres o solo lo son parcialmente, mientras que el 74% opina que dependen del gobierno y el 72% de las élites económicas.
Aunque el país figura entre los de “baja restricción” en el Índice Chapultepec de la SIP, el puntaje de Panamá descendió de 66.15 en 2022 a 61.73 en 2024, lo que marca un deterioro en la percepción de sus libertades informativas.
El estudio muestra que 81% de los encuestados accede a noticias a través del celular, principalmente por redes sociales (38%) y buscadores (33%), mientras solo 7% ingresa directamente a los sitios web de los medios.
Las plataformas más utilizadas son Instagram (73%) y WhatsApp (70%), y la mayoría califica la calidad informativa como “regular”. Además, 80% de los participantes expresó preocupación por no poder distinguir entre información real y falsa, y dos de cada tres creen que debería controlarse la desinformación, aunque ello limite la libertad de expresión.
Los periodistas consultados alertaron sobre la concentración de poder político y económico, la discrecionalidad en la pauta publicitaria estatal, la precariedad laboral y la autocensura. En el interior del país, reportaron condiciones laborales inestables y falta de respaldo gremial, mientras que en la capital destacaron la tensión entre la independencia editorial y los intereses empresariales.
El informe plantea seis líneas de acción prioritarias:
- Fortalecer la independencia y pluralidad mediática mediante formación ciudadana y profesional.
- Recuperar la confianza del público, transparentando la propiedad y el financiamiento de los medios.
- Combatir la desinformación con alfabetización digital y sostenibilidad económica.
- Despenalizar delitos de injuria y calumnia, evitando la autocensura.
- Garantizar transparencia en la pauta oficial y acceso a la información pública.
- Impulsar la actualización profesional de periodistas en entornos digitales.
“Panamá cuenta con espacios seguros para el ejercicio del periodismo, pero enfrenta retos estructurales que deben atenderse antes de que se conviertan en amenazas reales para la democracia”, subraya el estudio.