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Investigadores resaltan la importancia de los insectos como indicadores de la biodiversidad y salud de los ecosistemas

Panamá, 9 de junio de 2017. Cinco científicos panameños presentaron los resultados de sus investigaciones relacionados con los insectos en el Café Científico: “Los insectos como indicadores de la biodiversidad y salud de los ecosistemas”, actividad que fue organizada por la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación con la finalidad de fomentar la comunicación entre los investigadores y el público en general. Este es el noveno Café Científico que se realiza en el año 2017.

El evento contó con las ponencias de los reconocidos investigadores panameños: el Dr. Enrique Medianero, de la Maestría de Entomología de la Universidad de Panama; Aydeé Cornejo, M.SC., Investigadora del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES); el Dr. Juan Bernal, Profesor investigador de la Universidad Autónoma de Chiriquí (UNACHI); el Profesor Alonso Santos Murgas, MSc., del Museo de Invertebrados de la Universidad de Panamá; y el Dr. Hermógenes Fernandez, Investigador del Instituto de Investigaciones Científicas y Servicios de Alta Tecnología (INDICASAT-AIP).

El Café Científico inició con la presentación del Dr. Enrique Medianero, quién explicó como a través de la historia evolutiva de más 400 millones de años, los insectos son el grupo de organismos más diversos que actualmente habitan sobre nuestro planeta. De las 1.5 millones de especies de todos los organismos que han sido descritas cerca de un millón son artrópodos, principalmente insectos y se estima que esta cifra es solo es 20% de los insectos que habitan en el planeta. De todos los grupos de insectos conocidos son los escarabajos (Coleoptera), las avispas y hormigas (Hymenoptera), moscas (Diptera) y mariposas (Lepidoptera) las formas que dominan la diversidad.

El Dr. Medianero explicó: “Como este grupo de organismos ha alcanzado este éxito, indicó que la respuesta está en su elevada plasticidad genética, su pequeño tamaño, su exoesqueleto, la presencia de alas, su elevada tasa de reproducción, así como las diferentes formas de reproducción, las diversas formas de desarrollo que presentan en su ciclo de vida y las diferentes formas de alimentación que poseen. Todas estas características los han llevado a ocupar y explotar un incalculable número de nichos en los diferentes ecosistemas, así como a establecer relaciones con otros organismos. La relación de las diferentes especies de insectos y su ambiente los ha convertido en excelentes indicadores de las condiciones de estos ecosistemas, ya que algunos presentan estrechos límites de tolerancia a algunos factores ambientales que en ausencia de estos la presencia de las especies de insectos no se puede dar. Mientras que otras especies son capaces de tolerar y ocupar ambientes fuertemente alterados encontrando en estas condiciones las ideales para una alta abundancia. A nivel de la ciencia, los investigadores tienen reto de describir y entender la biología de la mayoría de especies de insectos, que aún no han sido descritas en los diferentes ecosistemas del planeta y el reto de estudiar los cambios y repercusiones al ambiente en general de las actuales amenazas de extinción debido al cambio ambiental global”.

Por otra parte, el Dr. Hermógenes Fernández explicó: “Los insectos que viven en sociedades, incluyendo las hormigas, abejas, avispas y termitas, son importantes en muchos de los roles funcionales de los ecosistemas terrestres. Las abejas son responsables del 70 % de la polinización de las especies de plantas. Las hormigas constituyen un grupo principal de predadores y herbívoros, y son denominadas ingenieras de ecosistemas terrestres. Las avispas son esenciales controladoras de comunidades de insectos, en particular de insectos que son plagas de cultivos agrícolas y forestales. Y las termitas, que junto con las hormigas representan el 50% de la biomasa total de animal de cualquier ecosistema terrestre”. A través de su presentación el Dr. Hermógenes, explicó cómo los insectos sociales (en particular hormigas y abejas), son ingenieros, moduladores y promotores de la salud del ecosistema y cuáles son los principales servicios ecosistémicos que ellos brindan a la humanidad. El Dr. Hermógenes finalizó indicando que, aunque los insectos sociales son abundantes, diversos y conspicuos, se necesita incrementar las investigaciones científicas sobre la biología y cómo emplearlos en beneficio de la humanidad.

La investigadora Aydeé Cornejo, mencionó que tradicionalmente, el concepto de salud había sido aplicado sólo a individuos y poblaciones, sin embargo, a finales de la década de los 80s se introdujo el concepto de salud de los ecosistemas como una metáfora con respecto a la salud humana. Indicó que una de las definiciones de “ecosistema saludable” fue la acuñada por Rapport et al., (1998), como “aquel que está libre de diestres y degradación, que mantiene su organización y autonomía en el tiempo, y es resiliente al estrés”. La investigadora Cornejo, explicó: “Cómo se hace el estudio de estimación de la diversidad y densidad de los insectos acuáticos como una alternativa para la evaluación de la salud e integridad de los ecosistemas dulceacuícolas”. La investigadora presentó los avances en el desarrollo de la línea de investigación en el Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de Salud (ICGES) y mencionó que con el Ministerio de Ambiente se ha logrado implementar las evaluaciones de estos organismos como un parámetro adicional en la Red de Monitoreo de Calidad de Agua a nivel nacional.

Además, con el Ministerio de Salud y el apoyo de la Universidad Tecnológica (UTP), la Universidad Autónoma de Chiriquí y el financiamiento de la SENACYT, fueron desarrolladas las herramientas tecnológicas que permitirán la implementación de Biomonitoreo de la calidad del agua de consumo humano en conjunto con las Juntas Administradoras de Acueductos Rurales de Chiriquí (AJAARCHI) como una alternativa para la vigilancia de la salud de sus fuentes de abastecimiento de agua.

Con el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) y el financiamiento del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), se ha ejecutado un monitoreo mensual desde el año 2014, de los organismos indicadores en la cuenca alta del río Chiriquí Viejo y se evalúa el impacto de los plaguicidas en la salud de los ecosistemas acuáticos. Finalmente, la investigadora Cornejo se refirió a los avances a nivel latinoamericano para el uso de estas herramientas, como parte de las iniciativas que se impulsan desde el Comité de Biomonitoreo de la Red Analítica de Latinoamérica y el Caribe (RALACA), del cual Panamá forma parte.

Por su parte, el Dr. Juan Bernal, abordó el tema biodiversidad de macro invertebrados acuáticos y calidad de las aguas de cinco ríos de la provincia de Chiriquí. El Dr. Bernal, indicó: “La provincia de Chiriquí cuenta con una importante red hidrográfica que es utilizada para actividades agrícolas, ganaderas, producción energética y consumo humano. Por tal motivo se han realizado, desde el año 2005 hasta la fecha, estudios con la finalidad de determinar la diversidad de los macro invertebrados acuáticos y la calidad ecológica del agua de los ríos Chiriquí Viejo (RChV, Cuenca 102), Gariché (RG, Cuenca 102), Mula (RM, Cuenca 106), David (RD, Cuenca 108) y Caldera (RC, Cuenca 108)”.

El Dr. Bernal, realizó muestreos cualitativas y cuantitativas en diferentes micro hábitats en estos ecosistemas. Para los cálculos de diversidad se utilizó el índice de Shannon-Weaver y para la calidad de agua el BMWP/Pan. Los resultados más relevantes indican una diversidad de macro invertebrados acuáticos que oscila entre diversidad Media para los ríos Chiriquí Viejo y Gariché, y diversidad Alta para los ríos Caldera, Mula y David.
Estos ríos se caracterizaron por contar con aguas de buena calidad o no alteradas de manera sensible. La única diferencia encontrada fue en el río Chiriquí Viejo, donde la calidad del agua fue regular a moderadamente contaminadas. El desarrollo de actividades antrópicas en estos ríos deteriora el ecosistema y las comunidades de macro invertebrados acuáticos.

El Dr. Bernal, también informó de las contribuciones al conocimiento taxonómico y ecológico del género Anacroneuria, a través de la identificación de cinco especies: Anacroneuria Annulipalpis, A. Benedettoi, A. marca, A. planicollis, A. quetzali y dos especies aún por identificar nombradas Anacroneuria sp. 1 y Anacroneuria sp. 2. Con estos estudios se amplía el ámbito de distribución de A. benedettoi para la provincia de Chiriquí y se reporta A. quetzali por primera vez en Panamá.

El Prof. Alonso Santos indicó: “En los Trópicos, los insectos en especial las abejas de las orquídeas dependen de las plantas para sobrevivir. Las abejas Euglossinae como se les conocen por su lengua larga para alcanzar su alimento en lo más profundo que se encuentre en las flores. Su diversidad y abundancia depende de muchos factores ambientales y otras variables como la altitud y diversidad de plantas con flores. Actualmente este grupo de insecto está sufriendo una fuerte presión por muchos factores como por ejemplo el avance de la frontera agrícola, la tala indiscriminada, la deforestación y el cambio climático”. El Prof. Alonso explicó cómo pequeñas intervenciones en los factores limitantes del ambiente pueden afectar significativamente a las poblaciones de abejas de las orquídeas y de paso la diversidad de plantas en los bosques tropicales por interferir en el proceso de polinización de las plantas con flores.

Los Cafés Científicos continuarán a lo largo del año 2017, con más diversidad de temas, para así seguir fomentando el debate entre la comunidad científica y el público en general.